Prithú

Según la mitología hinduista, Prithú es un emperador (chakravarti), nombrado en las escrituras sagradas y considerado un avatar (encarnación) del dios Visnú.

También es llamado Prithi y Vainiá (literalmente, ‘hijo de [el rey] Vená’).

La epopeya Majábharata (siglo III a. C.) y el texto Visnú-purana lo describe como un avatar de Visnú (Singh, pág. 1713).

[3]​ El Visnú-purana (siglo IV d. C., previo al desarrollo del Imperio guptá) y el Bhágavata-purana (siglo X d. C.) cuentan la historia de Prithú: una terrible sequía azotó la India, por lo que los bráhmanas le echaron la culpa al rey Vená, descendiente del piadoso rey Dhruva, y dijeron que si había sequía es porque seguramente él había descuidado los rituales védicos.

Así, los bárbaros bráhmanas mutilaron el cuerpo del Vená y revolvieron sus entrañas.

Finalmente, Prithú acorraló la vaca, pero ella le explicó que si la mataba morirían también sus súbditos.

Así la Tierra comenzó a dar sus bienes: vegetación y granos para el bienestar de la humanidad.

[1]​ El dios creador Brahmá reconoció a Prithú como un avatar del dios Visnú, ya que Prithú tenía en la mano el chakrá (filoso disco decapitador) de Visnú como marca de nacimiento.

Prithú fue adorado en vida como una encarnación de Visnú y ahora se le considera un semidiós naga.

Murió en el bosque y Archi realizó la práctica satí arrojándose voluntariamente en su pira funeral.

La acción de Prithú como cazador que persigue a la Tierra como vaca muestra su lado aterrador.

Además tanto Prithú como Rudra están estrechamente asociados con sacrificios de animales (Doniger, pág. 91).

Los Kumaras predicaron al rey Prithú acerca de la devoción al dios Visnú.