Luis Lacasa (Ginés García Millán) es un prestigioso inspector de homicidios en Madrid que se ve forzado a aceptar un traslado a las islas Canarias, concretamente a la isla de Tenerife, donde trabajará junto a Naira Oramas (Natalia Verbeke), una carismática inspectora con la que, a pesar de sus diferencias y rivalidades, formará un buen equipo y al mismo tiempo, una complicidad que cuestionara sus férreas convicciones.
En junio de 2023, durante la presentación del Atresplayer Day, Atresplayer anunció por primera vez la serie procedimental Una vida menos en Canarias como una serie original de la plataforma.
En La Vanguardia: "escudándose en estructuras reconocibles y su espíritu desenfadado, Una vida menos en Canarias también pone a un servidor en un aprieto.
[11] Vertele escribió que la serie "se presenta ante el público con dudas sobre la capacidad de resolver el entuerto [...] en tierra de nadie, en un lugar incómodo" y describió su propuesta narrativa como "un tanto anquilosada", además de decir que los actores "navegan[...] por distintos registros buscando encontrarse en un punto común", criticar el ritmo diciendo que "los 50 minutos [...] parecen ligeramente hinchados" y lamentar la decisión de realizar solo cinco capítulos, diciendo que "hay poco margen para descubrir a un protagonista carismático de largo recorrido", aunque también dijo que a partir de su segundo capítulo, "en su sencillez, en esa inevitable intrascendencia, todo comienza a funcionar", sugiriendo al final que la serie encajaría mejor en un canal como Atreseries que en Antena 3 o Atresplayer.
[12] Sandra Navarro de TVienes fue aún más dura, describiendo el guion como "flojo y sin alma, con una comedia forzada y unos gags mal incorporados y utilizados", sus personajes como "[carentes] de carisma [...] son poco atractivos para el espectador", la química entre los dos protagonistas como "forzada e inexistente", y de los casos capitulares dijo que "carecen de tensión, de intriga [...] no llegan a atrapar, emocionar o sorprender al espectador", además de criticar las interpretaciones como "flojas", salvando únicamente a Ginés García Millán, Natalia Verbeke y Sergio Momo, concluyendo que la serie cuenta con "una idea de origen muy interesante, pero mal ejecutada".