Tomás Reggio

Regresó a Génova en 1851 como abad - párroco de la Basilica di Santa Maria Assunta (Génova); en este período fue también profesor de moral en el seminario y suscitó momentos de oración y formación religiosa para los trabajadores que se llevaron a cabo desde primeras horas de la mañana.Después de haber sido su editor durante mucho tiempo, en 1861 pasó a ser director del periódico Stendardo Cattolico.Como arzobispo trabajó para aliviar las tensiones entre el estado italiano y la Iglesia.Muy atento a los problemas sociales, continuó sus obras en favor de la clase obrera: dio un nuevo impulso a las sociedades obreras católicas, participó personalmente en la lucha por el reconocimiento del derecho al descanso vacacional y a la regulación del horario de trabajo.Una repentina enfermedad, que comenzó con un violento dolor en la rodilla derecha, le obligó a guardar cama; la infección empeoró y ni los frecuentes medicamentos ni las dos intervenciones realizadas en la rodilla pudieron curarlo.