Sin embargo descubren que no están solos como pensaban, un grupo de caníbales han atacado el búnker y los cuatro deben escapar y llevar el mensaje para tener una oportunidad de sobrevivir.
El rodaje tuvo lugar en la Base de las Fuerzas Aéreas Canadienses en North Bay con antiguas localizaciones del NORAD y la estación eléctrica R. L.
Peter Howell del Toronto Star afirmó que «la película muestra cómo con un reducido presupuesto se puede producir una típica película hollywoodiense con un decente uso del CGI».
[3] Por su parte, Jay Stone de Postmedia fue más crítico y comentó que los personajes estaban «poco desarrollados».
[4] Liam Lacey de The Globe and Mail también se mostró negativo con respecto al «reciclado» de las películas futuristas aunque admitió que las escenas eran «escalofriantes».