Durante los sucesos de Tekken 2 (20 años atrás en la secuencia cronológica de la saga), Jun Kazama se da cuenta del mal interior que habita en Kazuya Mishima.
Sumido en una batalla interior entre su Gen Diabólico y su «lado bueno» despertado por el amor que siente por Jun, Kazuya es derrotado por su padre, Heihachi Mishima, que recupera el control de la Mishima Zaibatsu y arroja a su hijo a un volcán para deshacerse de él.
Jun, embarazada de Kazuya, es atacada por el espíritu del Gen Diabólico de Kazuya, que pretende apoderarse del niño que está en su vientre.
Poco después, ante Heihachi se presenta un joven adolescente que afirma ser el hijo de Kazuya Mishima: Jin Kazama, su nieto.
Mientras tanto, en el resto del mundo, los artistas marciales más destacados comenzaron a desaparecer, siendo obra de Ogre, el cual se dedicaba a absorber las capacidades de los mejores artistas marciales del mundo.
Al darse cuenta de lo que ha ocurrido, le ordena a sus hombres que disparen a Jin, dándole él mismo el golpe de gracia con un disparo en la cabeza.
Quizás el cambio más notable en Tekken 3 es estar evadiendo, permitiendo que los combatientes caminen “en” o “fuera” del fondo, mientras que el elemento de fondo había sido en gran parte insignificante en los juegos anteriores de Tekken.
Otra característica agregada para aprovechar más completamente el espacio 3D fue habilitar el inicio de impulsar y correr en 8 direcciones, aumentando la movilidad de los combatientes.
Este minijuego situaba al jugador en varias etapas contra enemigos en una manera de movimiento lateral en sentido vertical.
Hay también un minijuego llamado Tekken Ball, similar al voleibol playero, donde uno tiene que “cargar” a una bola (golpear la bola con un ataque poderoso) para lastimar al oponente.
[1] Tekken 3 se convirtió en el primer juego en tres años que pudo recibir un 10 de un revisor de Electronic Gaming Monthly, con tres de los cuatro revisores lo que le da la mayor puntuación posible (Tekken 3 fue el primer juego en anotar un 10 en EGM, en su opinión revisada escala en que un juego ya no necesitaba ser "perfecto" para recibir un 10, el último juego en recibir un 10 de la revista fue Sonic & Knuckles); el único que se resistió fue el enigmático gurú de la revista, Sushi-X, quien dijo que "ningún juego que recompense a los novatos por abotonar botones nunca será lo mejor en mi libro", dando al juego un 9 de 10.
En GameSpot Jeff Gerstmann le dio al juego un 9.9 sobre 10, diciendo "No hay mucho entre Tekken 3 y un puntaje perfecto de 10.
Si los personajes exclusivos de PlayStation fueron mejores y el modo Tekken Force un poco más cautivador, podría haberse acercado a un puntaje perfecto".
y concluyó: "Es un logro que la serie nunca volvería a igualar".