Al terminar el bachillerato Sergio Galván Rey encuentra un apoyo totalitario en un entrenador llamado Petrella el cual lo introduce en el mundo del fútbol completamente.
Se inició en el Concepción FC en donde siempre se destacó por ser un jugador rápido, con mucho desborde, sacrificio y goles, también jugó para las reservas del Boca Juniors, luego un paso por el Deportivo Aguilares de la Primera B Tucumana, retornando posteriormente al Concepción Fútbol Club.
Al final de la temporada, marcó ocho goles en todas las competiciones, que le había empatado en el tercer lugar como máximo goleador del equipo.
Sin embargo, sus demandas salariales eran abrumadoras, razón por la cual el MetroStars decidió no presentar a Galván Rey de nuevo para el año 2006.
La temporada 2007 comenzó bien para Galván Rey, cuando anotó un gol en el primer partido con Atlético Nacional contra La Equidad.
En febrero de 2011, Galván Rey se trasladó a Independiente Santa Fe, club en el que dio por terminada su destacada carrera deportiva.