Es una de las selecciones más importantes y exitosos del mundo.
El balonmano es uno de los deportes más populares en Alemania, un hecho que se reflejó en 1938 cuando los teutones lograron su primer mundial en un campeonato en el que ejercían como locales.
Pero tuvieron que pasar 40 años para que la selección germana se coronara otra vez como la mejor del planeta, venciendo por 20-19 al combinado soviético en la final de 1978.
Después de una competición muy reñida que vio a 24 equipos nacionales disputarse el cetro mundial, el conjunto teutón hizo valer su condición de anfitrión y derrotó a Polonia en la final para alzarse con su tercer entorchado.
Alemania se proclamó campeona del Europeo 2016, tras vencer a España por (24-17).