Ricardo Castro Ríos
Debutó en cine en La cabalgata del circo (1945), más adelante se lució como pareja de Laura Hidalgo en María Magdalena (1954) y de Irma Córdoba en Cinco gallinas y el cielo (1957).Fue convocado en diversas oportunidades en que la película requería la apostura y la seducción de un galán.Así tuvo a su cargo el papel del seductor que envuelve con palabras dulces las intrigas de la comedia Una viuda difícil (1957), pero también supo mostrar la nobleza en la amistad, en Requiebro (1955), acompañando a Carmen Sevilla y Ángel Magaña dirigidos por Carlos Schlieper.Su capacidad para expresar la ternura y la emoción se mostró en el segmento El angelito de Todo el año es Navidad (1960), en el que trabaja junto a Nelly Meden, cuando encarna a Federico, el hombre casado que no puede tener hijos y se niega a la adopción, pero también supo ser el inescrupuloso delincuente de El gran robo (1968) que dirigió y protagonizó Rossano Brazzi en Argentina.Las protagonistas femeninas eran Delfy de Ortega, Angélica López Gamio, Iris Láinez y Bárbara Mujica.