El estilo de la arquitectura del retablo es gótico final, si bien las escenas figurativas muestran características plenamente renacentistas.
En 1511, casi acabado el banco, contrataría también el resto del retablo, con tres escenas monumentales en sus calles: la Asunción en el centro, el Natalicio de la Virgen a su derecha y la Presentación de Jesús en el Templo a su izquierda.
Es la zona del retablo donde Forment se muestra más avanzado, pues en los marcos de las escenas y sus arquitecturas y ornamentos, aparece decoración propia del renacimiento, como putti, cartelas o balaustres.
Asimismo, en el sotabanco aparecen escudos heráldicos sostenidos por angelotes y medallones, uno de los cuales muestra el autorretrato del autor, Damián Forment, y la efigie de su esposa, bajo la cual hay un epígrafe en latín que traducido reza: «Esta es la mujer del maestro que hizo esto».
Las escenas del banco aún conservan restos de la policromía original, aunque en las calles principales prácticamente ha desaparecido.