Aún siguiendo una evolución similar a Noruega y compartiendo un idioma común para todos los pueblos nórdicos en aquel entonces, el nórdico antiguo, los casi desconocidos reinos suecos se mantuvieron al margen de los acontecimientos de Escandinavia occidental, participando esporádicamente y casi de forma testimonial en sus eventos.
La etimología del nombre revela ese origen (Små = pequeño, land = tierras, países).
No es hasta la Alta Edad Media que Suecia entra en la historia de Europa siguiendo los cánones contemporáneos.
[5] Los primeros monarcas de la protohistoria coinciden en la saga Ynglinga, Ynglingatal[6] e Historia Norwegiæ.
Los nombres en paréntesis son reyes que no aparecen en la saga Hervarar, pero sí en otras fuentes: