Teresa, estudiante ecuatoriana, y que se le presenta como Tristeza, se le une mientras espera llegar a detener, en Cuenca, la boda de quien ella creía que era su enamorado.
Esperanza , una turista española , y Tristeza es una estudiante ecuatoriana, se conocieron en el terminal de Quito en la unidad de buses la cual se dirige hacia Cuenca, ellas quiere llegar a cuenca pero movidas por motivos diferentes.
Durante su trayecto, empezarán a conocerse entre ellas con mayor profundidad, así como también conocerán un poco más de Ecuador y su gente en un viaje que podría parecer singular; y que, sin embargo, intentaba reflejar la realidad ecuatoriana en los primeros años del siglo XXI.
Jesús se convierte en una especie de guía espiritual, sobre todo para Tristeza, cuya impaciencia por llegar a Cuenca crece al ver que, posiblemente, no llegue a tiempo para el matrimonio que quiere evitar.
Por las complicaciones del paro nacional, terminan en la playa, donde se despiden de Juan Andrés.