Además, se estableció la regla de 3 puntos por victoria, que hasta entonces eran 2.
Los rojiblancos, que también conquistaron la Copa del Rey, lograron el primer doblete de su historia.
[4]Debido a ello, el Real Valladolid y el Albacete Balompié, dos equipos descendidos a Segunda División la temporada pasada, serían invitados por la Liga para ocupar las dos plazas vacantes del Celta y el Sevilla, apresurándose a formalizar su inscripción y convirtiéndose de nuevo en equipos de pleno derecho en Primera División.
Viendo esto, tanto el Celta como el Sevilla presentaron sendos recursos amparándose en la Ley General de la Administración y del Procedimiento Administrativo Común, considerando que la Liga había vulnerado el derecho de ambas entidades a subsanar, una vez notificadas, las deficiencias documentales de un expediente entregado en plazo.
Riesgos similares se vislumbraban también si los excluidos fueran en este caso el Valladolid y el Albacete, que complementando los trámites tras la invitación recibida argumentaban haber adquirido el derecho a participar en la máxima categoría.
Siguiendo un sistema de liga, los veintidós equipos se enfrentaron todos contra todos en dos ocasiones -una en campo propio y otra en campo contrario- sumando un total de 42 jornadas.
Como novedad, todos los jugadores pasan a tener un dorsal fijo a lo largo de toda la temporada, siendo la numeración del 1 al 22 sin poder coincidir en el mismo equipo dos jugadores con el mismo número.
El andaluz se convirtió esta temporada en el primer colegiado en lograr el Trofeo Guruceta en tres ocasiones.
Los argentinos fueron los grandes dominadores del premio al mejor jugador iberoamericano de Primera División.
Finalmente, el Cholo Simeone, alma del campeón de liga, se llevó el Trofeo EFE.