Toño, preso por un crimen que él no cometió, logra ponerse en contacto con dos jóvenes abogados, quienes agarran este caso con esperanza de poderle regresar la libertad y mostrar su inocencia.
Gracias a este descubrimiento les permite reabrir este caso y poder anular la sentencia pasada para hacer un nuevo juicio y poder emprender esta lucha por la libertad de Toño.
Con un testigo acusador, el juez Héctor Palomares Medina[1][2] que ya había dictado sentencia de culpable y un sistema judicial fallido, la libertad de Toño parece casi imposible, pero Layda y Roberto no desisten.
Suman a Rafael Heredia, audaz y determinado abogado, para completar el equipo de defensa.
[4][5] A poco de anunciarse la suspensión en noticiarios, el asunto se convirtió en tema del momento o trending topic de Twitter, donde muchos comentarios evidenciaron indignación ante lo que se percibió como censura del Poder Judicial mexicano a una crítica en su contra.