En zonas libres no deben ser acosadas, pues se espantan fácilmente de su gallinero, retornando a la vida salvaje.
Estas exhibiciones de cortejo incluyen inflar la protuberancia roja en la cabeza, vibrar las alas y emitir llamados vocales distintivos.
El macho también puede realizar una danza especializada alrededor de la hembra para demostrar su interés y establecer un vínculo.
Los huevos son de color blanco cremoso y presentan una cáscara dura para proteger al embrión en desarrollo.
Cuidado parental: Una vez que los huevos eclosionan, los polluelos de Numida meleagris[3] salen del cascarón en un estado precocial.
Aunque son capaces de valerse por sí mismos desde el principio, los progenitores desempeñan un papel importante en su cuidado y protección.