Pancrazio Buciunì

Cuando se mira su cara salvajemente hermosa, con nariz corta, cejas extrañamente elevadas, parece que uno está viendo a un fauno de tiempo inmemorial”.[6]​ Cuando en 1931 el barón Wilhelm von Gloeden murió, Pancracio Buciunì, Il Moro, fue nombrado su heredero y albacea.No obstante conseguiría ser declarado inocente en el juicio que siguió en un tribunal de Mesina (1939-1941).Según Giovanni Dall’Orto[10]​ su trabajo de tantos años en el laboratorio de von Gloeden terminó por convertirlo en un técnico experto, por lo que no tuvo problemas, tras la muerte del maestro, para continuar imprimiendo los negativos heredados y vendiendo las fotografías.Aun así, seguramente tuvo que esperar a la muerte del maestro para experimentar con sus propias fotos de desnudo.
Posible retrato de Pancrazio Buciunì vestido de niña y fotografiado por Wilhelm von Gloeden .