Naja philippinensis

La cobra filipina (Naja philippinensis) es una especie de serpiente del género Naja, de la familia Elapidae.

La serpiente fue descrita por primera vez por el herpetólogo estadounidense, Edward Harrison Taylor, en el año 1922, y es endémica de Filipinas encontrándose en las islas de Luzón, Mindoro, Catanduanes y Masbate y aunque pendiente de verificación podría haber ejemplares en las islas Calamianes y en la isla de Palawan.

Se trata de una especie de serpiente venenosa y de comportamiento agresivo que habita en la jungla densa y en campos abiertos; es una cobra que puede llegar a medir hasta 2 metros y que se alimenta de ranas, lagartijas, pájaros y pequeños mamíferos.

Su veneno puede matar a un ser humano en 30 minutos.