[8] Añó comenzó escribiendo cuentos a temprana edad y publicó su primera historia en 1990.
Empieza la etapa de corrección en clave distópica sobre la vejez, el cambio climático y el mundo futuro, o Presagio, que retrata a una víctima de la violencia doméstica, entre otros, han sido publicados en prestigiosas revistas internacionales[9] y traducidos a una decena de idiomas.
[14] "Los personajes son más importantes" en sus libros "que el argumento",[15] debido a "una introspección, una reflección, no sentimental, pero desde un punto femenino".
En 2016 Añó fue distinguida por la asociación cultural Nuoren Voiman Liitto en Sysmä, Finlandia.
En 2018 es seleccionada para la residencia Cracovia UNESCO Ciudad de Literatura en Polonia.