Monasterio de Tatev

El conjunto monástico se sitúa en el borde de una profunda garganta del río Vorotán.

Impresionado al ser descubierto, el aprendiz pierde pie y cae al abismo mientras clama a Dios para que le conceda alas, lo cual, en armenio se dice así: “Ta Tev”.

La altiplanicie de Tatev se ha usado desde tiempos precristianos, albergando un templo pagano.

Con el crecimiento de la importancia económica y política del centro, los edificios antiguos se quedaron pequeños, y el obispo Hovhannes (Juan) consiguió ayuda financiera del príncipe Ashot de Syunik para construir el monasterio nuevo.

En 1087, se construyó la iglesia de Santa María al norte del complejo.

El monasterio fue dañado durante las invasiones seleúcidas en el siglo XII y con el terremoto de 1136.

Fue saqueado otra vez durante las incursiones de las fuerzas persas dirigidas por Aga Muhammad Khan en 1796.

La ciudad de Goris se convertía en la capital del estado no reconocido con Garegin Nzhdeh como su comandante supremo.

En años recientes, la iglesia de los Santos Pablo y Pedro ha sido reconstruida, pero los restos del campanario permanecen destruidos.

En 1295, la iglesia de San Gregorio, que había sido destruida durante un terremoto, se reemplazó por una nueva a iniciativa del metropolitano Stepanos Orbelian.

En el siglo XVIII, se hicieron adiciones en la residencia del obispo, celdas para los monjes, almacenes, refectorio, cocina, panadería y bodega.

Está dedicada a la Santísima Trinidad, localizada al sur de la catedral.

El monasterio c. 1920