Hasta hace relativamente poco tiempo, mantenía la imagen tranquila y pausada típica de los pueblos de vieja tradición ganadera dividiéndose en dos barrios principales: El Arenal y Navalías.
En cuanto a su arquitectura religiosa, destaca la ermita de Nuestra Señora del Rosario.
La planta es de cruz latina tradicional contando con un transepto que alberga dos capillas laterales.
No cuenta con tallas relevantes en su interior - a excepción de la talla policromada de la Virgen que preside el camarín del retablo principal - este templo, sustituye a otra construcción más antigua que databa del siglo XIII aproximadamente y que estaba emplazada sólo unos metros más al este que la actual.
La fiesta más popular es La Virgen del Rosario, que se celebra el primer domingo de octubre.