Destaca por su excelente tiro exterior, su buena penetración a canasta, y su dureza defensiva.
A los ocho años se apuntó en el equipo de su barrio.
En 1992 fue al primer equipo del Ionikos, en el cual jugó tres temporadas en la A-2.
En la temporada 1994/95 fue el segundo máximo anotador y reboteador de la categoría.
En este mismo año consiguió la medalla de oro Mundobasket Junior con la selección griega.