Marita Koch

Sin embargo, este récord ha sido puesto en duda debido a las ya reconocidas prácticas de dopaje en la RDA,[2]​ algo habitual en dicho país para mejorar el rendimiento de sus deportistas.

A Marita Koch se le acusa de doparse para competir.

Aunque en 1984 no pudo participar en la olimpiada de Los Ángeles, siguió demostrando que era la mejor del mundo.

Para muchos solo fue un "producto de laboratorio", ya que parece que en los años 70 y 80 se llevó a cabo un programa de dopaje por iniciativa del Estado en la República Democrática Alemana, En cualquier caso ella nunca admitió estas acusaciones, y su récord mundial de 47,60 s en los 400 m sigue vigente, sin que ninguna otra atleta hasta el momento haya podido siquiera acercarse a ese registro.

En 1987 se retiró de las pistas[1]​ y contrajo matrimonio con su entrenador Wolfgang Meier.

Marita Koch (1984).