En 1891, viajó a París por primera vez, donde estudió con Jules-Joseph Lefebvre y con Benjamin Constant en la Académie Julian acercándose al Simbolismo.
Durante su estancia en Gran Bretaña pintó los cuadros Autorretrato y Mujer Bretona.
Los años pasados en Italia dieron a su trabajo una gran variedad de colores y un tono más optimista.
En los primeros años del siglo XX, bajo la influencia de post impresionismo, desarrolló una brillante y más colorida paleta.
Junto con Verner Thomé y Ellen Thesleff, fundó el Grupo Septem.