En toda su historia, la liga ha estado dominada por equipos de Biskek, la capital del país.
Aunque hay divisiones inferiores, es la Federación kirguisa quien decide si un equipo puede participar en la máxima categoría, sobre la base de sus resultados y viabilidad económica.
Los participantes juegan entre sí hasta en cuatro ocasiones, a ida y vuelta.
Se otorgan tres puntos por victoria, uno por empate y ninguno en caso de derrota.
Al término de la temporada regular, el equipo que más puntos obtiene se proclama campeón y representará a Kirguistán en la Copa AFC.