Lente de contacto

Leonardo da Vinci observó en que hundiendo la cabeza en un recipiente de cristal con agua se modificaba la visión.

[5]​ Aunque, según los informes, Herschel nunca probó estas ideas, más tarde fueron propuestas por inventores independientes, incluido el médico húngaro Joseph Dallos, que perfeccionó un método para hacer moldes a partir de ojos vivos.

[6]​ Esto permitió la fabricación de lentes que, por primera vez, se ajustaban a la forma real del ojo.

No deben usarse si ya se tienen infecciones o irritaciones oculares, pues las agravan.

Antes de ser manipuladas, se debe lavar bien las manos con agua tibia y un jabón suave neutro.

No es aconsejable su uso permanente durante días, sino dejar pasar como mucho un día y luego retirarlas, de lo contrario se es propenso a caer en alguna alergia o infección.

Se debe dejar donde está y aplicarle encima una solución salina o fisiológica con el fin de rehidratarlo.

Si hay dolor, ojo rojo o visión borrosa, quitarse las lentes y consultar al profesional idóneo.

Un lente de contacto sobre un dedo.
Lente de contacto.
Colocación del lente de contacto en el ojo.