Lanioturdus torquatus

[3]​ Esta curiosa ave, la cual algunos consideran que tiene muchas afinidades con los batis y malaconótidos, fue descubierta en 1837 por James Edward Alexander en las montañas Naukluft en Namibia.

Siempre lleva apuntando para abajo su cola corta, con una pequeña marca negra en el extremo de las dos plumas centrales.

Es un ave común, endémica, reproduciéndose en su región, con cortas migraciones estacionales.

Al igual que otros batis su vuelo es torpe con batido de alas bajo y rápido.

Construye su nido en las acacias espinosas y ambos sexos colaboran en su fabricación.