La zona (película)

Mediante un amparo judicial han conseguido que se disponga que la policía no puede ingresar al lugar sin orden judicial; pero ese privilegio puede ser revocado si se produce en su interior un acto de violencia.

Su participación en los hechos y la violencia de la que fue testigo da a Alejandro una perspectiva distinta del mundo.

Será esta paranoia la que les conducirá a la situación en la cual una opinión peligrosamente totalizadora no permite en su seno la diversidad de pensamiento, toda acción que contradiga a la mayoría será rápidamente controlada.

Por otra parte, el uso de diferentes texturas en la imagen resalta las diferencias entre un afuera polvoriento, hostil, desordenado y un adentro -el interior de la Zona- mostrado tan idílico, limpio y perfecto que se vuelve un decorado falso e hipócrita en cuyo marco, finalmente, ese conjunto de gente común y corriente, gente que podría ser uno mismo, acaban convertidos en una turba actuando como verdaderos animales.

Tal es el caso del filme español Pájaros muertos, de Guillermo y Jorge Sempere.

El filme, que combina la denuncia con el thriller, le sirve a Pla para exponer la barbarie de los que se dicen civilizados y la reacción de quienes conservan reparos morales (especialmente el adolescente, para quien la experiencia será decisiva).

Aunque se observan algunas incongruencias y una escena innecesaria que alarga el final debe señalarse el acierto de evitar la tentación del discurso moralizador".

[3]​ La crónica del diario Clarín encuadra la película como: “un thriller que combina un suspenso creciente con cuestionamientos sociales, por momentos demasiado ostensibles”.

En Francia la película ha salido en formato DVD con un error en su descripción, está descrita como "Le nouveau film choc de l'Amérique du Sud" (La nueva película impactante de América del Sur); siendo que México se encuentra geográficamente en América del Norte.