El diario nació en febrero de 1910 impulsado por Martín Ocampo.
[2][3] Inicialmente tuvo al abogado Fernando María Guerrero como director.
[2] La Vanguardia, que nació a raíz de la desaparición del periódico El Renacimiento, mantuvo una línea editorial independiente y de corte nacionalista.
[4] Tenía su sede en Manila y se editaba en lengua española.
Llegó incluso a editar un suplemento, el «Sabatino de La Vanguardia».