José Reyes Ferriz

Hay tres aspectos en la auditoría practicada al penúltimo año del exalcalde de Juárez, José Reyes Ferriz, que llaman la atención tanto por el hecho de ser probables actos constitutivos de delito, como por conjugar una serie de prácticas comunes nunca corregidas y que le costaron al erario cientos de millones de pesos a lo largo del tiempo.

enviado al Congreso del Estado, la Auditoría Superior del Estado informa en su último párrafo que ha detectado una serie de irregularidades contables que podrían ser motivo no sólo de una llamada de atención administrativa, sino hasta de una causal penal.

“El cuarto de los tiliches”, le llaman coloquialmente los auditores de la ASE a ese amontonamiento de datos que se encuentran un día sí y otro también cuando practican auditorías a entes públicos.

Son enormes listados de registros contables mal clasificados, que deberían estar en otros conceptos de gasto o de ingreso, según sea el caso y que, por lo tanto, pueden llegar a ser constitutivos de delito.

La auditoría practicada al último año completo de la gestión de José Reyes Ferriz genera tres denuncias penales, pero el exalcalde ya no está aquí para responder por ellas.