Los isoflavonoides son una clase de flavonoides (metabolitos secundarios de las plantas, que se sintetizan en principio, a través de la llamada "vía biosintética de los flavonoides") encontrados en las leguminosas y sólo en pocas no leguminosas.
[1] El grupo comprende a más de 230 estructuras, y los dos más conocidos son la genisteína y la daidzeína.
Algunos, como los rotenoides, poseen una fuerte acción insecticida, otros tienen efectos antiestrogénicos.
Por ejemplo, las ovejas que pastan en tréboles ricos en isoflavonoides suelen volverse infértiles.
En la década del 2000 los isoflavonoides se han vuelto conocidos por su papel como "fitoalexinas", compuestos antimicrobianos sintetizados por las legumbres en respuesta a la infección por bacterias y hongos, que ayudan a limitar la difusión del patógeno invasor.