En Suiza, la iniciativa popular es un derecho civil que permite a un número determinado de ciudadanos proponer un texto para que sea sometido a votación popular.
Si el texto es validado por los organismos competentes y aceptado por el (pueblo) soberano, entrará en vigor.
La posibilidad de modificar directamente la legislación federal y no solo la Constitución, se ha propuesto varias veces (incluyendo una vez, en la forma de una iniciativa popular en 1958), pero siempre sin éxito.
La Asamblea puede decidir asimismo proponer un contraproyecto, al emitir una recomendación para su aceptación o rechazo.
Así, tanto la iniciativa popular, como el contraproyecto que la Asamblea federal opone a esta, pueden ser aceptadas.