Como resultado del embargo causado por el tratado CoCom (Coordinating Committee for Multilateral Export Controls, Comité Coordinador para el Control de la Exportación Multilateral), los ordenadores no pudieron ser importados en gran escala desde los países capitalistas.
Este ordenador fue conocido como MESM ("Malaya Elektronno-Schetnaya Mashina" o "pequeña maquina de computación electrónica"), construido entre 1948 y 1951.
Strela podía procesar hasta 2.000 instrucciones por segundo, y era, en su época, el ordenador más productivo de la Unión Soviética.
Las estaciones de trabajo construidas en la Unión Soviética son el SM EVM, ES-1845 y el DVK.
Estas máquinas se convirtieron en la base para ordenadores militares de la flota soviética y fueron producidos a gran escala.
Micro-80 no tuvo mucho éxito, pero sentó el precedente para otros ordenadores personales HUM en numerosas publicaciones.
Pese al parecido que tenían estos ordenadores con el Radio-86RK original, su compatibilidad con el software de esta última era muy limitada.
La revista Yunij Technik (Joven ingeniero) publicó los detalles de este ordenador HUM en 1988.
Ganó una mayor popularidad al ser apoyado por otras revistas, aunque nunca fue producido en fábricas.
Otros ordenadores personales son el Agat, Korvet, Elektonika BK, UKNC, Mikrosha, Raduga, Poisk, Iskra, y Dubna 48K.
En la República Democrática Alemana, los principales fabricantes de hardware de ordenador eran VEB Robotron y VEB Kombinat Mikrelektronik; estando la primera involucrada en el desarrollo de un estándar en los países del CAME con los ordenadores ES EVM y SM EVM, mientras que la segunda fabricaba microprocesadores clonicos y algunos ordenadores personales como el KC85/2-KC85/4.
Y aunque el hardware era desarrollado por equipos polacos, el software provenía de la compañía británica ICL.
Otras plantas más pequeñas situadas a lo largo del país producía monitores y periféricos.