Francisco Armañá
Francisco Armañá Font,[1] en catalán: Francesc Armanyà Font, (Villanueva y Geltrú, 1718 - Tarragona, 1803), fue uno de los eclesiásticos de su tiempo que más defendió las ideas de la ilustración, razón por la cual se lo consideró un jansenista.Fue examinador sinodal del obispado de Barcelona.[3] Nombrado obispo lucense en 1768, emprendió una campaña en pro de la instrucción, tanto de sacerdotes como del pueblo, instituyendo escuelas gratuitas de enseñanza primaria.El año siguiente fue nombrado arzobispo de Tarragona y aquí también participó en la fundación de la Sociedad Económica.Colaboró en todas las obras públicas locales y acabó, con las rentas de la mitra, la reconstrucción del acueducto romano, que surtía de agua a la ciudad.