Una bella mujer está contemplando una película en la habitación de un hotel.
Su nombre es Laure Ash (Rebecca Romijn), y es una mujer tan seductora como peligrosa: lo que se suele llamar una auténtica femme fatale.
Junto a su amante, Black Tie (Eriq Ebouaney), está preparando un golpe de lo más preciso durante la celebración del Festival de Cannes.
Siete años después regresa a París convertida en la esposa del embajador estadounidense en Francia (Peter Coyote).
Black Tie sale de la prisión dispuesto a encontrar a Laure, ahora convertida en Lily, y hacerle pagar muy cara la traición.