El director Alberto Lecchi señaló que "el desafío de la historia es conseguir hacer creíble que una mujer como Romina se enamora de un tipo tan torpe como Pérez".
El largometraje empieza con un hombre solo, al que todos conocen por El Mudo, que recoge sus cosas para irse a trabajar como conductor de autobús.
En una de sus paradas se encuentra con una maestra amiga suya que le pide un favor, llevar un paquete a una clínica para que lo analicen.
Poco a poco ambos personajes, sumidos en la soledad y el dolor aunque no quieran reconocerlo, se van conociendo y uniendo más y más hasta que se ven obligados a hacer un viaje juntos que les descubre todos sus secretos y las pequeñas mentiras que les unen.
Darío Grandinetti consiguió también en la misma el premio del Público.