En enero de 2004 fichó por el FCM Bacău, donde se convirtió en un fijo en el once inicial.
Al año siguiente su equipo gana dos trofeos, una Liga y una Supercopa de Rumanía.
Esa misma tempora el Steaua realiza un gran papel en la Copa de la UEFA, llegando a semifinales, donde cae derrotado ante el Middlesbrough.
Goian se convirtió en un jugador clave en su equipo en esa competición siendo el máximo anotador (cinco goles) y disputando 14 encuentros.
No pudo disputar el tercer partido, contra los Países Bajos, por acumulación de tarjetas amarillas.