«Dead and gone» fue interpretada en vivo en la LI edición de los Premios Grammy.
El vídeo fue dirigido por Chris Robinson y fue filmado la primera semana de febrero en Los Ángeles, California.
saliendo de un coche y entrando en prisión mientras las puertas se cierran tras él.
Antes de ser anunciada como sencillo, la canción debutó en el número 76 del Billboard Hot 100.
Tras su lanzamiento como sencillo, en la primera semana de enero realizó una entrada del número 99 al 2, pero no pudo con el exitoso «Right round» que estuvo en el número uno durante cinco semanas consecutivas.