Después de completar sus estudios en las universidades de Wittenberg y Leipzig, viajó por Holanda, Francia, y Inglaterra.
A su regreso se estableció en Sulzbach y se dedicó al estudio de lenguajes orientales, especialmente hebreo, más tarde estudió la cábala, en la cual creyó encontrar pruebas de las doctrinas del Cristianismo.
En su opinión el Adam kadmon de los cabalistas es Jesús, y la triada superior de los sefirot (Kéter, Jojmá, y Biná) representa la Trinidad.
Entre 1677 y 1678 publicó los primeros dos volúmenes de su Kabbala Denudata, sive Doctrina Hebræorum Transcendentalis et Metaphysica atque Theologia (Sulzbach, 1677-78).
En 1684 publicó otros dos volúmenes bajo el título de Kabbala Denudata (Frankfurt del Meno, 1684).