Hacia 1812, estudia botánica en Harvard, en la cátedra de William Dandridge Peck (1763-1822).
Bigelow tuvo la idea de establecer un cementerio en Mount Auburn (Cambridge, Massachusetts) ya en 1825, adquiriéndose los terrenos necesarios cinco años después.
Bigelow se dio a conocer también por cuestionar la eficacia de las terapias utilizadas por entonces.
Publicó un libro titulado Discurso sobre las enfermedades autolimitadas, donde criticaba la lealtad ciega de los médicos a las drogas y a las intervenciones que estaban incluidas en las prácticas de la denominada "medicina heroica".
[5] Para fundamentar sus ideas, Bigelow escribió acerca de cómo los resultados entre los pacientes sin ningún tratamiento y los tratados con "terapias heroicas", eran similares.