Las ruedas de Larmahue o «azudas» son un sistema de regadío de la localidad chilena de Larmahue, que comenzó a ser usado a inicios del siglo XX.
Están unidas por su eje a dos fuertes pilares.
Las ruedas movidas por la corriente dan vueltas elevando y luego arrojando el agua mediante recipientes colocados en todo el perímetro, la mayoría de las cuales tiene un diámetro de cinco y seis metros y algunas tienen hasta ocho metros.
[1] En 2002 fueron incluidas en el listado del patrimonio mundial en peligro World Monuments Watch por su mal estado.
[2] Dos de los artesanos que se han dedicado a la construcción, mantenimiento y reparación de las azudas han sido nombrados tesoros humanos vivos por el Estado de Chile: Arturo de Jesús Lucero Zamorano (2014)[3] y José Eduardo Huerta Serrano (2018).