Un aula debe proporcionar el ambiente apropiado para el aprendizaje de los estudiantes que la utilizan.
Esto incluye: Los requisitos exactos, no obstante, pueden variar enormemente de acuerdo al país o a los recursos económicos.
Muchas aulas cuentan también con un sistema para proyectar diapositivas u otro tipo de información.
Resulta válido resaltar que en la conceptualización del aula, desde una perspectiva tradicional, se la concibe como el lugar en el que se deben respetar las normas institucionales y al profesor como conocedor y transmisor de conocimientos.
Puede, por tanto, indicarse que el clima social es el resultado, entre otros factores, del conjunto de interacciones, vivencias, aspectos estructurales, emocionales y motivacionales que influyen en el proceso de aprendizaje.
Según sea la relación que se establezca entre dichos factores, así serán las características del clima de aula, la influencia que ejerza sobre cada alumno y alumna y sus reacciones hacia el aprendizaje.
[2][3] Existen factores tanto endógenos, como exógenos, que van determinando las vivencias en las instituciones educativas.