Fue introducido al fútbol por su padre, el representante del equipo local de la aldea.
En 1991, Wenger guio a la victoria en Mónaco el Coupe de France, pero su incapacidad para recuperar el título de liga en las temporadas posteriores llevaron a su salida del club por consentimiento mutuo en 1994.
[2] Entrenó brevemente, en la J. League japonesa, al Nagoya Grampus Eight, donde ganó la Copa del Emperador y la Supercopa de Japón durante su estancia.
[5] Arsenal retuvo la Copa FA en 2003 y un año más tarde recuperó el título de Liga, convirtiéndose en el primer club en ganar la liga toda la temporada invicto desde Preston North End, 115 años antes.
Arsenal hizo su primera aparición en una final de Champions League en 2006, aunque perdieron ante el Barcelona.
La carrera futbolística de Arsène Wenger no fue muy fructífera, al menos en el plano personal.
[6][7] Wenger era prácticamente un desconocido en Inglaterra (aunque había sido captado previamente como un potencial Director Técnico de la Asociación de Fútbol), pero tuvo un impacto inmediato y rápidamente llevó el club al éxito.
Sin embargo, con el tiempo, los fichajes de Fredrik Ljungberg, Thierry Henry y Robert Pirès se asentaron y el Arsenal de Arsène Wenger ganó un nuevo doblete en la temporada 2001/02.
Wenger ha sido reconocido por su capacidad para identificar y desarrollar jugadores con alto potencial.
En términos estructurales, Wenger reformuló los métodos de entrenamiento y alimentación del plantel, eliminando prácticas perjudiciales para el rendimiento.
La afición del Arsenal ha respaldado en diversas ocasiones su gestión, lo que se reflejó en expresiones como Arsène knows, visibles en pancartas en el antiguo estadio de Highbury.
[14] Durante octubre y noviembre de 2005, Wenger protagonizó una confrontación mediática con José Mourinho, entonces entrenador del Chelsea FC.
Wenger respondió que solo se limitaba a contestar preguntas de la prensa y consideró el comentario como «irrespetuoso».
Aunque inicialmente Wenger sugirió la posibilidad de presentar una queja formal ante la FIFA, no se llevó a cabo ninguna acción.
De manera similar, Gordon Taylor, presidente del PFA, afirmó que, aunque el Arsenal era un club inglés, su éxito no lo era.
Wenger sostuvo que la nacionalidad no era un criterio relevante en la selección de jugadores, sino sus cualidades deportivas.
[14] En otro episodio, Lassana Diarra declaró que su paso por el Arsenal no le dejó ninguna experiencia positiva y que no recibió apoyo de Wenger, a diferencia de otros jugadores.