En Corea del Sur se produjo un escándalo nuclear cuando el país tuvo que hacer frente a una serie de cierres de reactores nucleares debido a documentos falsos que databan de 2012. Corea del Sur depende en gran medida de la energía nuclear. [1]
Durante noviembre de 2012, el país suspendió dos reactores nucleares tras descubrir que las piezas habían sido suministradas con certificados falsos. [2]
El 10 de octubre de 2013, Corea del Sur acusó a unas 100 personas, entre ellas un alto funcionario de una empresa de servicios públicos estatal, de cargos de escándalo. Los funcionarios señalaron además que restablecerán la conformidad con las normas de los reactores que fueron suspendidos para su inspección y sustitución de piezas. [3]
El 7 de febrero de 2014, la Comisión de Seguridad Nuclear declaró que, en su investigación realizada desde mediados de 2013, se habían encontrado ocho casos de 2.075 muestras de componentes de reactores fabricados en el extranjero que habían sido suministrados con documentos falsos, aunque los nombres de los países que habían realizado las transacciones siguen sin revelarse. [4]