El movimiento por la oficialidad de la lengua asturiana ( movimientu pola oficialidá de la llingua asturiana en asturiano), también conocido como movimiento por la oficialidad ( movimientu pola oficialidá ) es el movimiento social presente en Asturias , en el noroeste de España, que reclama que el Estatuto de Autonomía del Principado de Asturias otorgue al asturiano el mismo protagonismo que al español, tal y como ocurre en otras Comunidades Autónomas con lengua propia.
El movimiento se basa en la idea de que la lengua asturiana , como lengua propia del Principado de Asturias , merece un tratamiento similar al de otras lenguas regionales españolas ( vasco en el País Vasco , catalana en Cataluña, Comunidad Valenciana y Baleares y gallega en Galicia ), además de apoyar la idea de que se trata de un patrimonio inmaterial que merece la pena preservar, por lo que es necesaria la oficialidad para asegurar su supervivencia. Otras visiones del movimiento, más centradas en los derechos civiles , destacan la falta de derechos que tiene el ciudadano medio, si quiere utilizar el asturiano en la administración.
Si bien algunos sectores de la población asturiana siempre se han preocupado por la protección y el uso de la lengua asturiana , con defensores como Jovellanos (que a finales del siglo XVIII propone la creación de una academia que regule el asturiano), [1] es en los años setenta cuando surge el movimiento por la oficialidad. La primera manifestación al respecto se produjo en 1976, bajo el lema « Bable nes escueles, autonomía rexonal », ya que por aquel entonces la mayor preocupación era la enseñanza del asturiano en la escuela, así como su protección general. Paralelamente a ella se creó entonces una campaña con el mismo lema, con multitudinarias pintadas con ese lema por toda Asturias. [2]
Tras el reconocimiento de la lengua gallega , la lengua catalana y la lengua vasca como lenguas oficiales a través de sus respectivos Estatutos de Autonomía , el movimiento se centró más en conseguir este reconocimiento, no concedido en el Estatuto de Autonomía del Principado de Asturias de 1981.
En las décadas siguientes, el movimiento se va extendiendo poco a poco, consiguiendo el apoyo de partidos que inicialmente se oponían a él. Izquierda Unida ( Izquierda Unida en asturiano) aceptaría la oficialidad como un propósito para los años noventa. En el plano social, el movimiento también tendría más aceptación, con logros como la creación de una categoría a la mejor canción en asturiano en los Premios de la Música Española, [3] o la creación de una ley para el uso y promoción del asturiano. [4]