La comedia se puede dividir en varios géneros según la fuente del humor, el método de presentación y el contexto en el que se presenta. Estas clasificaciones se superponen y la mayoría de los comediantes pueden encajar en varios géneros. Por ejemplo, los cómics inexpresivos a menudo caen en la comedia de observación, o en la comedia negra o la comedia azul para contrastar la morbilidad o la ofensividad del chiste con la falta de emoción.