La hambruna que azotó Sudán en 1998 fue un desastre humanitario causado principalmente por violaciones de los derechos humanos , así como por la sequía y la incapacidad de la comunidad internacional para reaccionar con la rapidez adecuada ante el riesgo de hambruna . [1] La zona más afectada fue Bahr el Ghazal, en el suroeste de Sudán . En esta región murieron más de 70.000 personas durante la hambruna. [2]
La hambruna fue causada casi en su totalidad por los abusos de los derechos humanos y la guerra en Sudán del Sur. [3] A pesar de las afirmaciones del gobierno sudanés de que sólo los grupos rebeldes eran los culpables, la sequía también jugó un papel importante. [4] Human Rights Watch culpó a los siguientes grupos: [1]
Se culpa al gobierno y a Kuanyin Bol por su papel en la destrucción de la agricultura local durante su intento de tomar la ciudad de Wau . [5] Se culpa al SPLA por mantener la esclavitud y robar la ayuda. [4]
La situación se vio agravada por la llegada tardía de la temporada de lluvias [3] y la falta de respuesta de la comunidad internacional a la situación. [6]
Los efectos en la región fueron enormes, con un exceso de mortalidad estimado en alrededor de 70.000 personas. [7] Se cree que muchas más personas fueron desplazadas, con más de 72.000 personas reportadas migrando de las zonas rurales amenazadas a Wau solamente entre mayo y agosto de 1998. [8] Los efectos en el país incluyeron – indirectamente – hambruna ya que el gasto se concentró en los materiales de guerra, es decir, armamento, suministros médicos, etc., en lugar de la asistencia a la agricultura y ganadería. La situación en Bahr El Ghazal se vio agravada por la falta de una fuerte intervención gubernamental, ya que el gobierno del Norte no cooperó con el gobierno del Sur.
El 15 de julio de 1998 se firmó un alto el fuego, unos ocho meses después de que el gobierno sudanés advirtiera por primera vez de una posible hambruna. [6] Tras numerosas prórrogas, este alto el fuego duró casi un año, hasta abril de 1999. Sin embargo, la milicia baggara siguió haciendo caso omiso del alto el fuego, lo que redujo la capacidad de las agencias de ayuda para ayudar. [9] Sin embargo, gracias a una buena cosecha y a este alto el fuego, la situación se controló a finales de 1998. [10] Sin embargo, la zona ha seguido en problemas y desde finales de 1998 se han producido varias advertencias de hambruna.