Los Mayos fueron una serie de pinturas del siglo XVII y principios del XVIII en París. Fueron encargadas por el gremio de orfebres de París para ofrecerlas a la catedral de Notre-Dame de París en los primeros días del mes de mayo. La tradición comenzó en 1630 y desde entonces hasta 1707 se ofreció una pintura cada año, con la excepción de 1683 y 1694.