El esquí para discapacitados fue un deporte de exhibición olímpica por primera vez en los Juegos Olímpicos de Invierno de 1984. Se celebró un eslalon gigante alpino solo para hombres, con medallas otorgadas en cuatro categorías de discapacidad diferentes. Como deporte de exhibición, estas medallas no contribuyeron al recuento general de medallas. Estas carreras se llevaron a cabo además de las pruebas alpinas y de cross country en los Juegos Paralímpicos de Invierno de 1984 en Innsbruck . El esquí para discapacitados volvería a exhibirse en los Juegos Olímpicos en 1988. Un total de 29 esquiadores discapacitados de 11 naciones participaron en los Juegos de 1984.