Brooklands era un predio situado en la localidad de Weybridge en el condado de Surrey, Inglaterra, Reino Unido, donde funcionó el primer autódromo construido específicamente para carreras de motor en la historia del deporte.
Desde 1987 funciona el Museo de Brooklands, que tiene una gran colección de los primeros automóviles, motocicletas y aviones asociados a Brooklands, incluyendo el Concorde.
En 2006 se inauguró el centro de conducción Mercedes-Benz World.
Durante la Primera Guerra Mundial, Brooklands sirvió como fábrica de aviones militares.
La actividad deportiva retornó en la década de 1920, y en 1926 y 1927 se disputaron las dos primeras ediciones del Gran Premio de Gran Bretaña.