El ceceo es un trastorno del habla en el que una persona articula mal las sibilantes ( [ s ] , [ z ] , [ ts ] , [ dz ] , [ ʃ ] , [ ʒ ] , [ t͡ʃ ] , [ d͡ʒ ] ). [1] Estas malas articulaciones a menudo dan lugar a un habla poco clara en idiomas con sibilantes fonémicos .
Los tratamientos exitosos han demostrado que las causas son funcionales más que físicas: es decir, la mayoría de los ceceos son causados por errores en la colocación de la lengua o la densidad de la lengua dentro de la boca en lugar de ser causados por alguna lesión o deformidad congénita o adquirida en la boca. El problema más frecuentemente discutido es el empuje lingual en el que la lengua sobresale más allá de los dientes frontales. [3] Esta protrusión afecta el habla y la deglución y puede provocar ceceo. La anquiloglosia o frenillo lingual también puede ser responsable del ceceo en los niños; sin embargo, no está claro si estas deficiencias son causadas por el frenillo lingual en sí o por la debilidad muscular posterior a la corrección del frenillo lingual. [4] Las sobremordidas y las submordidas también pueden contribuir al ceceo no lingual. Los ceceos temporales pueden ser causados por trabajos dentales, exceso de saliva, protectores bucales, aparatos dentales como dentaduras postizas, aparatos dentales o retenedores o por lenguas hinchadas o magulladas. [ cita requerida ]
Los ceceos causados por el frenillo lingual pueden ser tratados por un dentista o un otorrinolaringólogo (ENT) con una frenectomía lingual o incisión láser, que demora menos de 10 a 15 minutos en completarse. [5] [6] [7]
En el caso del ceceo interdental, el terapeuta enseña al estudiante cómo mantener la lengua detrás de los dos incisivos frontales. [8]
Un método popular para corregir los trastornos de la articulación o del ceceo es aislar los sonidos y trabajar en la corrección del sonido de forma aislada. El sonido básico, o fonema , se selecciona como objetivo del tratamiento. Por lo general, se considera y se apunta a la posición del sonido dentro de una palabra. El sonido aparece al principio de la palabra, en el medio o al final de la palabra (inicial, medial o final).
Tomemos como ejemplo la corrección del sonido "S" (ceceo). Lo más probable es que un logopeda emplee ejercicios para trabajar el "Sssssss". [ aclarar ] Las palabras de práctica iniciales probablemente consistirían en palabras con la inicial "S" como "say, sun, soap, sip, sick, said, sail". Según este protocolo, el logopeda aumenta lentamente la complejidad de las tareas (contexto de las pronunciaciones) a medida que mejora la producción del sonido. Ejemplos de mayor complejidad podrían incluir decir palabras en frases y oraciones, decir palabras multisilábicas más largas o aumentar el ritmo de la pronunciación.
Con este método, el terapeuta del habla y el lenguaje logra el éxito con su estudiante al enfocarse en un sonido de una manera fonéticamente consistente. La consistencia fonética significa que un sonido objetivo se aísla en el nivel más pequeño posible (fonema, fonema o alófono ) y que el contexto de producción debe ser consistente. La consistencia es fundamental, porque factores como la posición dentro de la palabra, la agrupación con otros sonidos (vocales o consonantes) y la complejidad pueden afectar la producción.
Otro método popular para tratar el ceceo es el uso de dispositivos especialmente diseñados que se colocan en la boca para proporcionar una señal táctil de exactamente dónde debe colocarse la lengua al pronunciar el sonido "S". Se ha demostrado que esta retroalimentación táctil corrige los errores de ceceo dos veces más rápido que la terapia tradicional.
Al utilizar uno o ambos métodos, la repetición de contextos consistentes permite al estudiante alinear todos los procesos necesarios para producir el lenguaje de manera adecuada: habilidades lingüísticas (capacidad de formular sonidos correctos en el cerebro: ¿Qué sonidos necesito hacer?), planificación motora (voz y movimientos de mandíbula y lengua: ¿Cómo produzco el sonido?) y procesamiento auditivo (retroalimentación receptiva: ¿Se produjo el sonido correctamente? ¿Necesito corregirlo?).
Un estudiante con un trastorno de la articulación o del ceceo tiene una deficiencia en una o más de estas áreas. Para corregir la deficiencia, se deben realizar ajustes en uno o más de estos procesos. El proceso para corregirlo es, en la mayoría de los casos, un proceso de ensayo y error. Sin embargo, con tantos factores, aislar las variables (el sonido) es imperativo para llegar al resultado más rápidamente.
Una estrategia de tratamiento fonéticamente consistente implica practicar lo mismo una y otra vez. Lo que se practica es consistente y no cambia. Las palabras pueden cambiar, pero el fonema y su posición son los mismos (por ejemplo, sip, sill, soap, etc.). Por lo tanto, la corrección exitosa del trastorno se encuentra en la manipulación o cambio de los otros factores involucrados en la producción del habla (posición de la lengua, procesamiento cerebral, etc.). Una vez que se logra un resultado exitoso (habla), la práctica constante se vuelve esencial para reforzar las producciones correctas.
Cuando se domine el sonido difícil, el estudiante aprenderá a decirlo en sílabas, luego en palabras, luego en frases y luego en oraciones. Cuando un estudiante pueda decir una oración completa sin cecear, la atención se centrará en hacer los sonidos correctos a lo largo de una conversación natural. Hacia el final del curso de terapia, se le enseñará al estudiante cómo controlar su propio habla y cómo corregirlo según sea necesario. La terapia del habla a veces puede solucionar el problema, pero en algunos casos la terapia del habla no funciona.