El término asocial se refiere a aquel individuo con una fuerte falta de motivación para participar en la interacción social y/o la preferencia por las actividades solitarias.
El término asocial es distinto de antisocial ya que este último implica una aversión activa o antagonismo hacia otras personas o al orden social en general.
[3] El individuo generalmente, como integrante de una sociedad, comparte con los demás determinados valores, normas, modelos y símbolos establecidos que facilitan la convivencia.
Sin embargo, no todos los individuos presentan la misma adhesión a esas normas y valores.
Por ello, la adaptación social no implica necesariamente conformidad, sino que puede conllevar la innovación o modificación de los elementos que integran una determinada cultura o sociedad.